Al principio de empezar a correr, solo sales por placer o para ponerte en forma pero poco a poco vas exigiendo más y llega el momento de participar en tu primera carrera.
Hasta los corredores con más experiencia se ponen nerviosos los días antes de la carrera, así que no te preocupes porque no eres el único.
Para que todo marche viento en popa y calmar los nervios para ese día tan importante, aquí van unos cuantos consejos que os ayudarán.
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Prepara todo lo que te hace falta la noche de antes: ropa, zapatillas, dorsal, pulsómetro… para no ir con prisas la mañana de la carrera.
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No estrenes zapatillas el día de la prueba, pueden aparecer dolores, ampollas o rozaduras.
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Llega con tiempo de sobra al lugar de la carrera para evitar los nervios de las prisas y poder calentar antes de la salida.
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Como es tu primera carrera , mejor que te pongas de los último porque los primeros corredores suelen ir muy rápido y así evitarás empujones. Recuerda que es la primera y vas a pasarlo bien.
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Intenta ir de menos a más. Es mejor empezar con un ritmo más tranquilo y poder aumentar el ritmo que empezar fuerte y tener que disminuir por fatiga.
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Una vez cruces la meta, no pares en seco. Intenta continuar caminando un tiempo para bajar gradualmente tus pulsaciones.
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Y lo fundamental, ¡diviértete!